Últimamente me está dando por ver pelis de aliens, así que tras ver la aventura de Jake Sully (nombre aprendido por repetición) en Avatar, me he preparado un bol de palomitas, he aprovechado que mañana es fiesta, me he acomodado con mi novia en el sofá y nos hemos dispuesto a ver Distrito 9 esperando decepcionarnos por enésima vez tras las expectativas que los comentarios y las críticas nos habían creado. Me extiendo tras el salto pero lo resumiré en una frase: Distrito 9 es la "Hijos de los Hombres" de 2009.
La trama del film nos sitúa en Johannesburgo (Sudáfrica), donde hace 20 años se "posó" una nave alienígena que se quedó inmóvil suspendida sobre la ciudad. En ella se encontraban un gran grupo de aliens que estaban sobreviviendo en unas condiciones precarias y los habitantes de la tierra les ofrecieron refugio en un distrito creado exclusivamente para estos seres. Un distrito donde vivirían en chavolas y la delincuencia sería el día a día de estas criaturas, demostrando la hospitalidad humana. Todo esto nos lo cuenta el debutante Neil Blompkamp (apadrinado por Peter Jackson) de un modo documental, con entrevistas, cámara al hombro y cortes entre situaciones. Si bien este falso documental se irá diluyendo en el metraje, el estilo de grabación continuará siendo el mismo con el avanzar de la historia, de forma que siempre tendremos un punto de vista distinto y menos espectacular que lo que nos suelen ofrecer otras películas del mismo género.
Antes la he comparado con "Hijos de los Hombres", y es que sus similitudes no se basan sólo en la excelente calidad de ambas películas o en que ambas estén rodadas con un estilo visual distinto, ambas son, además, una demostración de lo despreciable que es llega a ser humano (siendo ésta mucho mas ligera que la de Cuarón) y en ambas se trata la evolución de un héroe protagonista que nunca había deseado verse envuelto en los acontecimientos que suceden (siendo Wicus mas repelente que el personaje de Clive Owen). Sin embargo las similitudes se desvanecen al llegar al final del metraje donde Distrito 9 se orienta hacia el espectáculo, brindando unas escenas de acción muy bien planificadas y que, con los excelentes efectos especiales integrados en esa fotografía "documental", hacen soltar la adrenalina que el espectador ha ido acumulando durante la dura evolución de los acontecimientos.
Tal vez sea porque la trama no está al servicio de la espectacularidad, o tal vez porque realmente me ha sorprendido, pero tras disfrutar de Avatar y tras ver Distrito 9 no puedo evitar pensar que puede mas el ruido que el mensaje. No voy a negar que el film de Cameron sea muy bueno (y mejora viéndolo como fue concebido, en 3D), pero para mi gusto la variedad de situaciones a las que se enfrenta Wicus y su modo de actuar, así como la forma en la que se va resolviendo la trama han hecho que para mi gusto, Distrito 9 sea mucho mejor película que Avatar, no tan espectacular, pero desde luego mucho mas redonda.
Comienza la lapidación...
No hay comentarios:
Publicar un comentario